¿Qué es el Autocuidado y Cómo Promoverlo?

¿Qué es el Autocuidado?

 El autocuidado es la capacidad y responsabilidad personal de cuidar de tí mismo, para promover tu bienestar integral.  Esto quiere decir, estar atento primero a reconocer, para luego atender, a todas tus necesidades: físicas, emocionales, mentales, sociales, productivas, ambientales, materiales o espirituales.

¿Por qué es tan importante?

 El autocuidado es vital para estar bien contigo mismo,  ser más eficiente y productivo en lo que haces y relacionarte con otros de manera sana.  Cuidar de tí mismo mejora tu calidad de vida, fortalece tu salud preventiva y es un principio básico para estar en capacidad de cuidar de otros. 

¿Es algo que debo hacer solo?

 Si bien el autocuidado es una decisión y una responsabilidad personal que nadie puede tomar por tí, llevarlo a la práctica puede requerir del apoyo de otros. Por tanto, aprender a cuidar de tí, también incluye reconocer cuándo es momento de pedir y recibir ayuda, para hacerlo asertivamente.

¿Cómo y cuándo promoverlo?

 Nunca es demasiado temprano para empezar a cuidar de tí mismo o demasiado tarde para intentarlo.  La ruta para cuidar de tí se resume en un RAP:  Reconocer tus necesidades, analizar (pensar) ideas para atender lo que necesitas y ponerlas en práctica (solo o con la ayuda de otros), lo más pronto posible.

Como toda habilidad de vida, la mejor manera de fortalecer el autocuidado y transmitirlo a otros, es con tus acciones en el día a día.  En la manera en que cuidas de tí, pides ayuda asertivamente y ayudas a otros a cuidar de sí mismos de acuerdo a sus necesidades y capacidades

Si convives con niños pequeños, adultos mayores, personas con necesidades y capacidades especiales, o bien, adolescentes y adultos que se encuentran física o emocionalmente exhaustos, por lo general su autocuidado requerirá de tu apoyo y el de otros.  Asegúrate de brindarlo de manera empática y encaminado a fortalecer su autonomía, por pequeña que sea.

¿Por dónde puedo empezar?  4 preguntas clave para iniciar a cuidar de ti:

 A continuación te presentamos 4 preguntas sencillas, que puedes utilizar contigo mismo y con otros, desde niños pequeños hasta adultos de la tercera edad, para fortalecer el autocuidado.

1. 1. ¿Cómo estoy, cómo me siento? Tomate unos minutos en silencio contigo mismo para reconocer cómo estas y cómo te sientes.

     

2. 2. ¿Por qué estoy / me siento así? Intenta preguntarte de 3 a 5 veces seguidas, por qué estás o te sientes de esa manera. Preguntarte varias veces por qué, te ayudara a descubrir la causa raíz que provoca tu sentir. 

    

3. 3.  ¿Qué puedo hacer para estar / sentirme mejor? Piensa en ideas concretas que te ayudarán a estar y sentirte mejor. Inicia por aquello que puedes hacer por ti mismo y toma también en cuenta si necesitas ayuda de otros.   

    

4.  4. ¿Cómo y cuándo lo voy a hacer?  Elige las ideas que puedas poner en práctica lo más pronto posible y define cómo y cuándo vas a hacerlo. 

Después de responder a estas preguntas, es momento de actuar: Ve y hazlo!

Recuerda que el autocuidado se va fortaleciendo paso a paso, día con día,  a través de la práctica constante en lo grande y en lo pequeño. Mientras más pronto inicies, a cuidar de ti, más pronto se convertirá en un hábito en tu vida.

Escrito por Claudia Hernandez, co-fundadora de Somos Holisticamente.